los inicios en berlin

Por alguna razón que desconozco, hoy y ahora quiero escribir de cómo fue el principio de esta estancia en berlin, estancia que forma ya parte de mi vida. Tendría que remontarme al dos de octubre del pasado año, 2006, día en que cogí el avión de la ya extinguida línea de easyjet valencia-berlín. Miro en mi memoria y revivo aquel día como si fuera ayer. Muchas cosas quedan atrás en el olvido, desaparecen los recuerdos, sin embargo quedan aquellas vivencias que han supuesto algo importante para nosotros. Aunque misteriosamente algunas de estas se evaporan y quedan otras sin importancia aparente, capricho de nuestra enigmática memoria. Cierto es que muchas cosas se me han olvidado, pero confío que todas las experiencias que quizás no recuerde como una imágen, sensación o sonido en mi cerebro, me hayan servido para avanzar en la compresión de mi propia existencia y evolución de mi yo como persona íntegra( esto ya es demasiado melodramático) Así que me transporto hacia aquella fecha. Un día soleado en mi ciudad, Valencia (aunque ya puedo decir que tengo una segunda), madrugón pues el avión sale pronto, los días anteriores han sido de miedo, susto por lo desconocido, pero infinitas ganas de embarcarme en una experiencia que debía guiarme en una nueva perspectiva por mi vida, que debía enseñarme nuevos caminos y abrir nuevos horizontes. Mi padre me lleva al aeropuerto, momentos anteriores han sido de despedida, familia, amigos... Quedo sólo en el aeropuerto. Sin embargo una sorpresa me espera todavía, mis amigos han venido de sorpresa, una gran ilusión. Definitivamente solo, subo al avión, converso con otros dos chicos erasmus, llego por fin a berlin. Ilusión pero miedo! Dos sensaciones tan dispares pero misteriosamente unidas. Por suerte, al aeropuerto vinieron maría, bego y julián, industriosos que habia conocido brevemente y debido a su ofrecimiento a venir a recogerme y mi descaro de aceptar alli estaban para acompañarme a mi residencia con todo mi maleterío. La verdad es que se lo agradezco mucho! Su ayuda y compañía hacia los confines de berlin, a mi entonces misteriosa eichkamp. Así que allí llegamos, desembarque mis propiedades en una habitación vacía y gris, en la que ahora ya tildo de mía y en la que ahora estoy escribiendo.
Así que ya estaba aquí, frente a un mundo nuevo por descubrir, sin conocer a nadie y debiendo salir adelante por mi mismo, yo, que no había cocinado en mi vida, ni puesto una lavadora. Ya tenía ganas, lógicamente no de poner lavadoras, jejeje.
Esa misma tarde decidí ir a ver un poquillo de la ciudad que me recibía y me acerqué a zoo, donde está la torre de la cúpula rota, luego ya me he cansado de ver la torrecilla, pero entonces todo era novedad. Cuando llegué a casa había una fiesta, genial, conocí a mis compañeros de piso, todos muy majos y tuvimos una agradable velada. Estaban Aron, hewad, Manu, Solomiya(que ya se ha ido), a los que he ido conociendo poco a poco.
Los primeros días consistieron en intentar conocer a gente, al día siguiente era la fiesta de la Reunificación Alemana y había puestecillos típicos en la puerta de Brandenburgo. Quedé con Julián y el grupo de españoles que llevaban ya desde septiembre, pasé un rato agradable, pero ellos ya eran grupo y me sentía un poco fuera, pero bien...
Tenía que hacer mucho papeleo, pisar la uni, matricularme, anmeldearme, comprar en ikea, ir al banco, comprar un móvil, conocer la resi y los alrededores... cada cosa una pequeña aventura, y en esto consistieron mis primeros días! Claro que durante este tiempo, conocí a muchos erasmus, la mayoría españoles y tuve las primeras fiestas, aunque ahora lo pienso y lo veo muuyy lejano, ahora ya me resulta todo tan familiar!